El investigador principal de seguridad cibernética Mordechai Guri de dicha universidad israelí, explico que los datos codificados por los hackers en las vibraciones de los ventiladores podrían transmitirse a un teléfono inteligente o smartphone comprometido ubicado cerca del ordenador objetivo.
«Observamos que los ordenadores vibran a una frecuencia correlacionada con la velocidad de rotación de sus ventiladores internos», dijo Guri. «El malware puede controlar las vibraciones del ordenador manipulando las velocidades internas del ventilador. Estas vibraciones inaudibles afectan a toda la estructura en la que se coloca el ordenador».
Gracias a este nuevo método de ciberataque, es posible conectar el teléfono con un PC sin ninguna conexión por cable o inalámbrica y transferir dicha información a un teléfono móvil cercano comprometido. Los sensores de acelerómetro en los teléfonos inteligentes no están asegurados y «cualquier aplicación puede acceder a ellos sin requerir permisos del usuario, lo que hace que este ataque sea muy evasivo».
La vulnerabilidad que utiliza cambios en las vibraciones de los ventiladores del PC para filtrar datos a través de un método complejo que involucra más de un dispositivo comprometido, ha sido bautizada como Air-ViBeR.